Por José G. Martínez Fernández.
El hecho que el
delincuente Claudio Villanueva Uribe “saneara” cuatro propiedades
de la Villa Federico
Warner de la ciudad de
Llanquihue, lo convirtió en enemigo de cientos de personas que viven
allí.
Y ello porque habitantes
de más de cien casas de dicha Villa, siguen pagando sus dividendos
mensualmente
tal como corresponde.
Lo que ha molestado a los
deudores de esa Villa es haber conocido a través de diversos medios
periodísticos
que dicho sujeto, junto al
rata Jaime Millán Stuven, tinterillo enemigo de la lengua de
Cervantes, y al entonces
Subsecretario del
Ministerio Nacionales de entonces, el mafioso Neftalí Carabantes,
miembro de la secta
llamada PRSD y de la
maldita ex Ministra de Bienes Nacionales Romy Schmidt C., también
del partido jefe
de la mafia, el PPD,
hicieran el “saneamiento” de cuatro propiedades con deudas
bancarias, mientras a más de
cien casas no le
concedieron dicho beneficio, hecho que se realizaba con el
conocimiento de HABITACOOP
y CITI-BANCO DE CHILE.
Los beneficiados “aman”,
obviamente, a Villanueva Uribe, pero son solamente unos quince, los
que viven
en las casas beneficiadas.
Al saber esa historia más
de cien familias afectadas están bastante molestas, porque mientras
CUATRO
SINVERGÜENZAS fueron
beneficiados por la Seremía de Bienes Nacionales de Puerto Montt el
año 2008,
a ellos no se les
benefició con el llamado “Decreto Ladrón” y DEBEN SEGUIR
PAGANDO SUS
VIVIENDAS.
Como se puede deducir el
mafioso Claudio Villanueva Uribe y su lugarteniente Jaime Millán
Stuven sólo
“salvaron” a cuatro
jefes de hogar y a más de cien los dejaron envueltos en una deuda
larga.
¡MALDITOS!
Pero esa gente ya sabe
dónde están las ratas de esa época.
Son del PPD, partido
principal del hamponaje concertacionista, del PRSD, grupúsculo
delicual y de la
Desgracia Cristiana,
partido de ratas y ladrones.
Los pobladores se han ido
enterando de esto a través de nuestros Blogs de denuncias que ya
tienen entre ellos
un alto número de
lectores y a través de reuniones que efectúan para preguntarse
porqué ellos siguen pagando
dividendos, mientras
cuatro casas no lo hacen. Son las casas que fueron “beneficiadas”
por la aplicación
del Decreto de Pinochet
(1979) que aplicó el delincuente Claudio Villanueva Uribe, en 2008.
